
Marionetas elaboradas por madres y padres del CEIP San Prudencio de Albelda. Teatro de sombras con «El topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza».
Hoy hemos llegado temprano al Ateneo porque el grupo que hacía el teatro de sombras necesitaba ensayar un poco, probar la música, etc. Habían dejado todo montado (fondo de escenario, luces, etc.) el viernes y estaban muy ilusionados por actuar fuera de su cole. Sobre todo las niñas y niños cuyas madres habían construido las marionetas y también les ponían voz. ¡Qué orgullosos estaban!
Y ha ido llegando la gente, y los críos no paraban de tocar los cuentos y Yo quiero este mama, léemelo. Y corrían por la sala, jugaban a esconderse con las cortinas, saltaban como cabritillos.

Aquí el grupo de actores: padres, madres, maestros y la chiquillería. ¡Qué contentos estaban los niños de ver actuar a sus madres! Y de salir al escenario. El Ateneo es una sala preciosa.
Qué gusto daba ese ajetreo (35 adultos y 25 niñas y niños) y han aplaudido a rabiar y nadie se iba…así que hemos ido improvisando lecturas en voz alta, hemos contado Todo el mundo va, etc. Y luego hemos mostrado los libros elegidos para la exposición, todos sobre caca, pedo, culo, mocos, piojos, etc. Una selección que llevamos mucho tiempo haciendo porque no todo vale, no se trata solo de que traten el tema, han de ser libros divertidos (pero no soeces), que aporten cosas, con ilustraciones y textos cuidados, que merezcan una relectura.
Ha sido una mañana distinta, han venido personas que no acuden habitualmente y esos nos hace mucha ilusión, que vean lo que hacemos, que descubran nuevos cuentos, etc. Muchas gracias a todos y especialmente a toda la troupe de Albelda por su generosidad y su buen hacer. ¡Parecían profesionales! ¡Bravo!