La tela de cuentos de Nalda

Contando El pastel está tan arriba de Susanne Strasser (Juventud, 2015). Es un cuento que requiere ayuda por parte de niñas y niños, han de subir y bajar los brazos. ¡Han colaborado un montón!

Esta mañana de domingo la hemos pasado en Nalda, un pueblo a 17 km. de Logroño que celebra este encuentro cultural denominado La tela de cuentos. Con un nutrido programa han pasado por allí cientos de familias para visitar una exposición en el  Castillo de Nalda, escuchar cuentos, bailar, tomar chocolate, migas de pastor, buñuelos de calabaza, etc. Nosotras hemos montado una mesa con nuestros cuentos preferidos, libros atractivos que se puedan ojear y hojear así de pie, un poco como cebos para que luego se acerquen a la biblioteca o a la librería.

Esta niña nos ha escuchado contar No dejes que la paloma conduzca de Mo Willems (Entrelibros, 2006) y ha venido a la mesa preguntando por el cuento porque quería verlo bien.


Plaza de la Tela en Nalda (La Rioja). Domingo 18 de noviembre de 2018. Dando los últimos toques a nuestra mesa llena de cuentos, son las 11.00. También han venido Sapo y Sepo. ¡Libros a la calle!

Las familias se han llevado nuestra lista de 20 cuentos 20 y algunas nos han confesado que nos siguen en el blog. ¡Qué ilusión nos ha hecho!


¿Puedo coger este cuento para leérselo a mi hermano? La decoración de ganchillos es de Mujeres de Nalda. ¡Daban calorcito!


No son albóndigas, son tarantantanes (miga de pan y huevo y salsita picante).  Había muchas cosas para comer. En Nalda hay varios colectivos, en este caso lo organizaban El Colletero y Panal. LLevan ya muchos años promoviendo iniciativas, un ejemplo magnífico de asociacionismo. En agosto celebran la fiesta de la ciruela claudia.


La niña pelirroja lee «Luna quiere un bebé» de Thierry Lenain y Delphine Durand (Edelvives, 2005) Uno de nuestros cuentos estrella en todos los talleres. Es la misma ilustradora que La casa de Tomasa.  Algunos al ver el cuento en la mesa decían: ¡Ese lo tengo yo!


Aquí os dejamos el programa completo. El año que viene los que todavía no conocéis el pueblo, subid a pasar la mañana en familia. ¡Hasta hemos bailado! El entorno del pueblo, el paisaje estaba hermosísimo: amarillos, verdes, es el otoño en Nalda.