Hablar de justicia social con los peques

Álbumes ilustrados que abordan temas como la autoridad, las clases sociales, la injusticia, el reparto de tareas, la pobreza, la riqueza, etc. ¡Búscalos en la biblioteca cuando abran!

Estos días han surgido diversos debates sobre la pandemia y hay quien afirma que afecta igual a todo el mundo y no es verdad. ¿Es lo mismo estar metido durante semanas en una casa de 45 metros que hacerlo en un cómodo unifamiliar o en un piso de 150 metros? ¿Es igual disponer de una amplia terraza que vivir en un piso interior? ¿Y cómo lo viven los que no tienen casa?

Es una buena oportunidad para hablar con nuestras criaturas de estos asuntos, sin dramatismos, pero es importante reflexionar juntos. ¿Nosotros somos pobres o ricos? ¿Qué es la caridad? ¿Y la justicia social? ¿Por qué hay clases sociales? ¿Qué es eso de la brecha digital? ¿Hay que obedecer siempre? ¿Los adultos siempre tienen razón? ¿Los que están en la cárcel son malos? ¿Por qué muchos son pobres?

No es necesario llegar a ninguna conclusión, solo ser sinceros y dar argumentos. Si como aseguran algunos saldremos de esta crisis del coronavirus cambiados, mejores personas, empecemos por leer con nuestras criaturas alguno de estos álbumes que cuestionan este mundo globalizado y consumista en el que vivimos. ¿Se os ocurre algún otro título que podamos añadir? ¡Cuidaos!

Los ingleses buscan buena literatura infantil y juvenil en otros idiomas

Di qui non si passa! / Isabel Minhós Martins; il. Bernardo P. Carvalho. Topipittori, 2015

Di qui non si passa! / Isabel Minhós Martins; il. Bernardo P. Carvalho. Topipittori, 2015. La autora y el ilustrador de este libro son portugueses. La editorial es italiana. Quizá este libro podría ser un ejemplo de lo que se están perdiendo los niños y niñas ingleses.

Hemos leído dos noticias en el periódico The Guardian, una el 4 y otra el 5 de septiembre  en las que se habla de la necesidad de poner en manos de las niñas y niños ingleses otras literaturas que no sean las creadas en lengua inglesa. Inglaterra tiene una larga tradición de Literatura Infantil y Juvenil y grandes autores e ilustradores (A.A. Milne, Joan Aiken, Roald Dahl, Beatrix Potter, Babette Cole, Lauren Child, etc.) seguramente los mejores, pero precisamente por ello, apenas compran derechos de obras en otros idiomas. Incluso grandes clásicos internacionales han sido traducidos muy tarde al inglés: Pippi, Heidi, Los Mumin, Asterix, Babar, etc.

Ahora hay un proyecto de Booktrust que subvenciona a aquellos editores que compren derechos de obras de LIJ en otros idiomas. Los propios editores reconocen no tener personal preparado para seleccionar buenos libros en otras lenguas.Tendrán que darse una vuelta por Bolonia, etc. Y es que parece que por fin se han dado cuenta de que se están perdiendo algo, de que la creatividad y las buenas historias pueden ser creadas en cualquier lugar del mundo y en cualquier idioma, no solo en inglés.